Hemos procesado nuestras trompetas en conserva a partir de materias primas frescas, durante la temporada de crecimiento, para garantizarle una textura ideal y el máximo de sabores. Puedes comerlo dorado en un poco de mantequilla o aceite pero también incorporarlo a tus deliciosas terrinas. Encuentra online esta conserva natural de esta seta de sabor muy característico y refinado. Los nombres vernáculos más comunes son cornucopia por su forma, trompeta de los muertos, trompeta de la muerte por su color negro y su abundancia alrededor del día de Todos los Santos (una leyenda los asocia con los muertos que emergen de la tierra para tocar estas trompetas y tocar un concierto sólo audible para ellos), o incluso rebozuelos negros (anglosajones). De la misma familia que el rebozuelo, se utiliza de la misma forma, pero su color negro permite importantes contrastes de color en el plato; el efecto es sorprendente, por ejemplo, con pasta fresca cocida en nata. Esta especie, muy extendida, crece en grupos principalmente en los bosques caducifolios (hayas, robles, avellanos, etc.).)o en ocasiones bajo bosques de coníferas, apreciando suelos pesados y muy húmedos (arcillosos, por ejemplo). Estos rebozuelos crecen en grupos, casi en alfombras, entre la hojarasca, en lugares oscuros. Aparecen en otoño (agosto a noviembre), y pueden ser muy abundantes después de fuertes lluvias. Este hongo a veces es difícil de distinguir del suelo por su color oscuro, su forma irregular, su pequeño tamaño y porque suele estar cubierto de hojas muertas. Además de un bajísimo contenido calórico, la trompeta de la muerte contiene una gran cantidad de proteínas y fibras de calidad que contribuyen al buen funcionamiento del organismo y al tránsito intestinal. Desde el punto de vista nutricional, esta seta contiene una gran cantidad de vitaminas y minerales esenciales para la salud. Entre ellos podemos citar el potasio, el fósforo, el hierro e incluso las vitaminas D, E y K. Consejo de preparación: Drene las Trompetas de la Muerte. Dorarlos en una mezcla de mantequilla y aceite. Sazona a tu gusto. Añade nata fresca y sirve con un escalope de ternera, por ejemplo.