Originalmente, el whisky de centeno fue destilado en los Estados Unidos por inmigrantes alemanes. Esta influencia cultural también está ilustrada por los más de 300 años de historia de la destilería Sasse. Con su RYE 094, Rüdiger Sasse interpreta esta tradición utilizando materias primas regionales. El brandy crudo se crea en una columna, el brandy fino en un alambique de cobre. El destilado elaborado a partir de un 75% de centeno y un 25% de malta de centeno tostada (temperatura de tostado 170-220 °C, EBC 800-1200) madura en barricas de roble blanco americano de tostado medio. El resultado impresiona con el sabor a vainilla, avellana, naranja, caramelo de roca y chocolate. Olor: cereales | avellana Gusto: vainilla | caramelo de roca | chocolate negro | Naranja finalizar: Grosella | pimienta negra Whisky puro de centeno 48,2% vol.