Este pimiento único crece en las tierras altas de la India y tiene un sabor fino y complejo debido a su contenido excepcionalmente alto de aceite esencial. La pimienta blanca es más picante, pero menos aromática que la negra o la verde. Todos los tipos de pimienta (blanca, negra, cristal) proceden de la misma planta pero sus sabores difieren en función de su madurez y del tratamiento realizado tras la cosecha. Para obtener pimienta blanca, se cosechan las bayas de pimienta cuando están maduras y se remojan en agua para quitarles la piel (y los granos se vuelven blancos). Luego se secan los granos y obtenemos así los famosos pequeños granos de pimienta blanca. El proceso de producción de pimienta blanca es laborioso, lo que explica que sea más cara que la pimienta negra. Además, la calidad del pimiento varía mucho y si el agua que se utiliza para limpiar los granos no está limpia, el pimiento puede tener un sabor rancio. Utilizamos exclusivamente variedades de pimiento autóctonas, a menudo en peligro de extinción y extremadamente aromáticas, que las comunidades locales han utilizado durante generaciones para el cultivo tradicional de especias.