Habiendo abandonado por completo la producción de Prosecco por parte de los enólogos del área de Trieste, en cambio se desarrolló a lo largo de las colinas venecianas, particularmente en la provincia de Treviso. En uno de los libros más importantes de la historia de los vinos italianos y probablemente el más importante para los vinos del Véneto, el autor menciona el Prosecco. Valeriano Canati, conocido bajo el seudónimo de Aureliano Acanti en su poema ditirámbico “Il Roccolo” en 1754 escribió “Y ahora quiero inmolarme con ese dulce Prosecco”. La DOCG (Denominación de Origen Controlada y Garantizada) obtenida en 2009 garantiza la calidad del vino espumoso italiano más famoso del mundo.