Rosolowska Vodka
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- Fundada en 2020
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rosolowska.vodka
Rosolowska fue creada y desarrollada en torno a valores que le son queridos. Probar este vodka es mucho más que la experiencia gustativa que proporciona. Significa también contribuir adhiriéndonos a nuestra visión del mundo de los espíritus y, en general, de la sociedad de hoy, pero especialmente de mañana. La historia del vodka Rosolowska nace del deseo de redescubrir y dar a conocer la esencia de esta bebida espirituosa, combinando el saber hacer tradicional y la innovación. Dejando las brumas del noroeste de Polonia, Jan Rosolowski se mudó a Francia en los años 90 para completar sus estudios.
Rápidamente se enamoró del estilo de vida francés.
Después de formar su familia, regresaba a menudo a su país de origen para presentarle a su hijo Zacharie la cultura polaca y sus raíces.
Grandes amantes de las bebidas espirituosas de calidad, padre e hijo siguen viajando regularmente a Polonia para interactuar con un círculo de destiladores experimentados.
Jan se lanza a la producción de vodka artesanal. Zacharie anima a su padre a profesionalizar su producción pero este prefiere seguir perfeccionando su alcohol.
Y sólo recientemente, después de veinte años de experimentación que deleitó a sus allegados, Jan finalmente decidió dejar que su hijo hiciera realidad su sueño de compartir su pasión: nació el vodka Rosoloswka, que combina el saber hacer polaco y la excelencia francesa.
Rápidamente se enamoró del estilo de vida francés.
Después de formar su familia, regresaba a menudo a su país de origen para presentarle a su hijo Zacharie la cultura polaca y sus raíces.
Grandes amantes de las bebidas espirituosas de calidad, padre e hijo siguen viajando regularmente a Polonia para interactuar con un círculo de destiladores experimentados.
Jan se lanza a la producción de vodka artesanal. Zacharie anima a su padre a profesionalizar su producción pero este prefiere seguir perfeccionando su alcohol.
Y sólo recientemente, después de veinte años de experimentación que deleitó a sus allegados, Jan finalmente decidió dejar que su hijo hiciera realidad su sueño de compartir su pasión: nació el vodka Rosoloswka, que combina el saber hacer polaco y la excelencia francesa.
