Nuestras mermeladas se elaboran en Alsacia, solo con fruta y azúcar, sin gelificantes ni conservantes. La segunda generación perpetúa la tradición de una mermelada sencilla y auténtica, cocinada en calderos de cobre centenarios, utilizando un proceso único asistido por computadora, que ajusta la cantidad de azúcar añadida de acuerdo con el azúcar ya presente en la fruta. Este saber hacer único ha permitido a Confitures du Climont obtener del Estado francés la etiqueta "Empresa del patrimonio vivo, la excelencia del saber hacer francés". Las raíces de jengibre se pelan antes de cortarlas en pequeños trozos que se confitan en pera Williams y azúcar. Esta receta tan original es una delicia para gourmets de todas las edades. Sugerencias de cata: Sobre tortitas con un poco de chocolate negro derretido.