La mermelada de grosella negra forma parte de una colección de mermeladas elaboradas con las mejores frutas francesas. Esta gama procedente de Francia explota cada terruño por sus especificidades para garantizar una producción en las mejores condiciones. Las grosellas negras para la mermelada de Fauchon proceden de Ile de France. El clima templado y húmedo de la región favorece su desarrollo y produce frutos jugosos y fragantes. La receta artesanal Fauchon libera el amargor de la grosella negra conservando su frescura. Los frutos se eligen meticulosamente en su justo punto de maduración para preservar e intensificar sus aromas y fragancias. Para realzar la calidad de los ingredientes, Fauchon perpetúa la tradición cociendo a fuego lento y en pequeñas cantidades, con azúcar de caña, en calderos de cobre. Este método ancestral resalta los sabores caramelizados y melosos que son característicos de las mermeladas Fauchon. La mermelada Cassis Fauchon o la ambrosía negra de la casa saben cómo despertar tu curiosidad. Debajo de su apariencia oscura, sorprenderá tus otros sentidos con sabores brillantes, fragancias cautivadoras e incluso una textura cremosa. Haciendo eco del terruño, la elegancia y la independencia, se parece un poco a la mujer fatal de la gama Fauchon. Ella recorre las mesas posicionándose como la imprescindible, para que tus degustaciones sean inolvidables. Su encanto cautiva a muchas personas y su carisma natural le da una energía extraordinaria que ilumina cada habitación en la que se encuentra. Como una joya en su estuche de terciopelo, la mermelada Cassis Fauchon aprovecha sus puntos fuertes para encarnar la esencia misma del arte culinario francés. Emancipado y seguro de sí mismo, la mermelada de grosella negra le infundirá una sensación de libertad. Ella te llevará a pasear cerca de los ríos cuando las primeras brisas otoñales comiencen a acariciar las hojas de los árboles y el canto de los pájaros complete tu lienzo.