Calvados Morin
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- Fundada en 1889
CALVADOS MORIN DESDE 1889 EN IVRY-LA-BATAILLE
Historia
La historia del Calvados Morin comenzó en 1889 en La Haye de Calleville, en el valle del Risle, antes de que Pierre MORIN sucediera a su padre y trasladara el pequeño negocio familiar a Brionne y posteriormente a Ivry-la-Bataille, un encantador pueblecito normando en el valle del Eure. Fue en las antiguas instalaciones de la Destilería de Thélème, licor famoso de la época, donde el Calvados Morin se instaló el 2 de febrero de 1945.
Este establecimiento se beneficia de unas instalaciones de envejecimiento únicas en Normandía, incluidas amplias bodegas subterráneas donde se almacenan varios cientos de pequeños barriles de roble, en los que reposa el preciado Eau-de-Vie.
Más de un siglo de experiencia
Desde 1889, nuestra empresa familiar se ha especializado en la mezcla y producción de Calvados "premium", elaborados a partir de "bebidas espirituosas de la tierra" que poseen las cualidades necesarias para elaborar un Calvados fino y de calidad. Seleccionados y elegidos entre las mejores cosechas de Normandía, es bajo la guía de nuestro Maestro de Bodega que los Calvados Morin son elaborados con amor y rigor.
El arte consiste en combinar distintos aguardientes en ensamblajes inteligentes para magnificar y exaltar los terruños de Normandía y seleccionar cuidadosamente los destinados al envejecimiento. Así, controlando la maduración cada día para preservar el bouquet y el perfume, este trabajo de paciencia encontrará su recompensa en la plenitud de un Hors d'Age suntuosamente ambarino.
Crianza
Calvados Morin es reconocido por la calidad de sus mezclas y el minucioso control de su calidad. El sabor de Morin es, en realidad, el fruto de una sabia combinación entre diferentes terruños y denominaciones.
Los aguardientes jóvenes seleccionados para su crianza se envejecerán inicialmente en barricas de 300 a 400 litros en bodegas sujetas a variaciones climáticas, lo que acentúa la oxidación y, por consiguiente, el envejecimiento. Esto produce una evaporación significativa (parte de los ángeles), un paso esencial para la correcta crianza de un aguardiente.
El Calvados, albergado en esta madera noble y fuerte que es el roble Limousin, desarrollará progresivamente, en una alquimia misteriosa, aromas sutiles y su bello color ámbar.
A través de la madera, el Calvados respirará durante años, perdiendo lentamente su fuego y digiriendo gradualmente los taninos de la madera, ganando gradualmente bouquet y aromas.
Un entorno único
El entorno único de nuestras bodegas trogloditas desempeña un papel fundamental en el desarrollo de nuestro Calvados. Excavadas en las colinas calcáreas del valle del Eure, las largas galerías cortan profundamente el acantilado. La atmósfera muy húmeda del lugar es ideal para añejar un Calvados cultivado en silencio y al abrigo de las vibraciones de la ciudad. Este “refinamiento” es un segundo paso muy importante en nuestro proceso de envejecimiento. La humedad ambiental, cercana al 100%, permite un descenso natural de los grados, lo que da como resultado aguardientes más suaves y armoniosos.
Historia
La historia del Calvados Morin comenzó en 1889 en La Haye de Calleville, en el valle del Risle, antes de que Pierre MORIN sucediera a su padre y trasladara el pequeño negocio familiar a Brionne y posteriormente a Ivry-la-Bataille, un encantador pueblecito normando en el valle del Eure. Fue en las antiguas instalaciones de la Destilería de Thélème, licor famoso de la época, donde el Calvados Morin se instaló el 2 de febrero de 1945.
Este establecimiento se beneficia de unas instalaciones de envejecimiento únicas en Normandía, incluidas amplias bodegas subterráneas donde se almacenan varios cientos de pequeños barriles de roble, en los que reposa el preciado Eau-de-Vie.
Más de un siglo de experiencia
Desde 1889, nuestra empresa familiar se ha especializado en la mezcla y producción de Calvados "premium", elaborados a partir de "bebidas espirituosas de la tierra" que poseen las cualidades necesarias para elaborar un Calvados fino y de calidad. Seleccionados y elegidos entre las mejores cosechas de Normandía, es bajo la guía de nuestro Maestro de Bodega que los Calvados Morin son elaborados con amor y rigor.
El arte consiste en combinar distintos aguardientes en ensamblajes inteligentes para magnificar y exaltar los terruños de Normandía y seleccionar cuidadosamente los destinados al envejecimiento. Así, controlando la maduración cada día para preservar el bouquet y el perfume, este trabajo de paciencia encontrará su recompensa en la plenitud de un Hors d'Age suntuosamente ambarino.
Crianza
Calvados Morin es reconocido por la calidad de sus mezclas y el minucioso control de su calidad. El sabor de Morin es, en realidad, el fruto de una sabia combinación entre diferentes terruños y denominaciones.
Los aguardientes jóvenes seleccionados para su crianza se envejecerán inicialmente en barricas de 300 a 400 litros en bodegas sujetas a variaciones climáticas, lo que acentúa la oxidación y, por consiguiente, el envejecimiento. Esto produce una evaporación significativa (parte de los ángeles), un paso esencial para la correcta crianza de un aguardiente.
El Calvados, albergado en esta madera noble y fuerte que es el roble Limousin, desarrollará progresivamente, en una alquimia misteriosa, aromas sutiles y su bello color ámbar.
A través de la madera, el Calvados respirará durante años, perdiendo lentamente su fuego y digiriendo gradualmente los taninos de la madera, ganando gradualmente bouquet y aromas.
Un entorno único
El entorno único de nuestras bodegas trogloditas desempeña un papel fundamental en el desarrollo de nuestro Calvados. Excavadas en las colinas calcáreas del valle del Eure, las largas galerías cortan profundamente el acantilado. La atmósfera muy húmeda del lugar es ideal para añejar un Calvados cultivado en silencio y al abrigo de las vibraciones de la ciudad. Este “refinamiento” es un segundo paso muy importante en nuestro proceso de envejecimiento. La humedad ambiental, cercana al 100%, permite un descenso natural de los grados, lo que da como resultado aguardientes más suaves y armoniosos.