La Divisoria 90% Garnacha Caladoc+10% Bobal, Vino Tinto Singular de mínima intervención

Vino singular de mínima intervención como “único en su especie”y “raro” por extraordinario y excelente. La Divisòria es de montaña situados 750 snm bajo un Suelo: Arcillo-calcáreo y con Vendimia: Manual Vinificación: Entre 2-3 semanas de maceración, 30% de racimo entero y fermentación con levadura autóctona. Crianza: 9 meses en barricas viejas de roble francés de 225 lts Embotellado: 15 de Junio de 2021, sin filtrar ni clarificar. Nota de Cata Fase visual: Color rojo picota con capa media Fase olfativa: Aromas intensos y elegantes de frutas negras y rojas con ligeros toques balsámicos y minerales. Fase gustativa: Entrada suave y golosa. Vino con nervio, equilibrado, debido a la combinación de taninos maduros y taninos extraídos del raspón proveniente de la maceración carbónica. Final de boca frutal, elegante y sedoso Variedad de uva 90 % Garnacha Caladoc 10 % Bobal Graduación alcohólica 12.5 % Alcohol Previo a la finalización de la licenciatura enología comienzo a realizar prácticas en varias bodegas valencianas. Una vez finalizados los estudios, decido aprovechar el tiempo, teniendo la oportunidad de trabajar en Burdeos (Haut Medoc y Saint Juillen), Nueva Zelanda (Villa Maria Estate), Borgoña (Remoissenet y Domain Parigot) y Chateauneuf-du-Pape (Maison Brotte). Prácticamente con las maletas hechas dirección a Chile, recibo una oferta laboral por parte de una conocida bodega valenciana. Tras un periodo de cinco años y medio trabajando como enólogo de dicha bodega, decido emprender un proyecto personal. La realización de este proyecto, era una idea que me llevaba rondando en la cabeza desde finales de 2018. En diciembre de 2016 me mudo a Siete Aguas, pueblo de la familia de mi padre y poco a poco voy conociendo el término, sus viñas y su peculiar climatología. A su vez, el panorama vitivinícola del pueblo no pinta demasiado bien, con viticultores mayores y una tendencia al arranque o abandono de viñas. Esta suma de factores y el agotamiento de realizar vinos comerciales para otra bodega, me dan el ultimo empujón para emprender un proyecto personal centrado en trabajar variedades autóctonas y realizar vinos de mínima intervención, con los que me pueda sentir a gusto e identificado.