Su nombre viene inspirado por el edificio Taipei 101, el rascacielos más alto en zonas sísmicas que cuenta con 101 pisos, teniendo en cuenta que el número 100 se considera el número de la perfección en la cultura asiática, realizando 101 pisos se quiso simbolizar la complejidad de aquel edificio e ir más allá de la perfección. En cambio, por la cultura occidental, la excelencia se encuentra en el 10, de esta manera con estas botellas de 2005, se quiere ir más allá con los sentidos sensoriales gracias a la intensidad dada durante todos sus años de crianza. Cava elaborado con un 75% de la variedad xarel.lo y 25% de Chardonay. Con más de 156 meses en botella, es un cava complejo de calidad premium. Cava de muy larga crianza de estilo oxidativo, muestra unas burbujas cremosas y finas, con aromas a frutos secos, a bollería , compota de fruta, notas a miel, membrillo. En boca agradable, sabroso, con cuerpo, de textura suave y con un largo post gusto que recuerda a las notas de evolución bajo un fondo fresco que lo hace muy equilibrado. Excelente cava para degustar y disfrutarlo.