Después de 15 años en Tahití, creamos una fábrica de jabón artesanal que floreció durante 5 años.
Nuestro objetivo siempre ha sido producir productos naturales en la naturaleza virgen y con los productos que ésta nos ofrece, por eso, al regresar a Francia continental, elegimos instalarnos en Aveyron.
Nuestros jabones se elaboran de forma artesanal, mediante el método de saponificación en frío, un proceso suave y ecológico que consiste en preparar la pasta de jabón sin cocer (lo que conserva en parte las propiedades de los aceites y demás ingredientes) y dejar que la saponificación se produzca de forma natural durante un periodo de secado de 4 a 6 semanas. 100% de origen natural, 100% biodegradable, libre de conservantes, libre de colorantes sintéticos, libre de aceite de palma, libre de Edta y amigable con el medio ambiente.
Elaborado a partir de materias primas de calidad, como aceites/mantecas orgánicos y naturales (arcillas y plantas). Se dice que son "sur gras", 8% mínimo, algunos aceites (coco, karité, etc.) no están saponificados deliberadamente, lo que permite que la piel se beneficie de sus propiedades nutritivas y suavizantes y conserve su película hidrolipídica y, por lo tanto, no la reseque. De aspecto muy crudo, están coloreados con arcilla, cacao, espirulina, y los perfumamos con notas muy ligeras de aceites esenciales, o fragancias de origen natural elaboradas en Grasse.
Todos nuestros productos cumplen con los estándares de calidad de la norma ISO 22716.
Producidos en un laboratorio francés, los jabones cumplen con el reglamento CE n° 1744/2008. 1223/2009 y buenas prácticas de fabricación. Cada lote está sujeto a trazabilidad interna.
Todas nuestras fórmulas han sido validadas previamente por un toxicólogo antes de ser comercializadas.
Los productos también se notifican en el Portal de Notificación de Productos Cosméticos (CPNP) y el laboratorio se declara a la Agencia Nacional de Salud y Medicamentos (ANSM).