Una paleta tenue pero vibrante de colores sensoriales de Italia, campos de maíz bañados por el sol, paredes con frescos, higos triturados, polen, manantiales naturales de aguamarina y corteza húmeda. Este gourmand floral meloso y matizado habla de la sensación de eterna floración que reside allí. Con notas de petitgrain, mandarina, madreselva, higos triturados, jazmín sambac, corteza de canela, sándalo haitiano y vetiver indonesio.