Vela perfumada a base de cera vegetal de soja y aceite esencial de palo santo. Gracias al aceite esencial de Palo Santo, el aroma que desprende el encendido de esta vela purifica la energía del ambiente, ahuyenta el estrés y la ansiedad, favorece el reequilibrio y la armonía interior. Se puede utilizar como apoyo para la concentración, la meditación, la relajación y el bienestar, desarrollando características energéticas como protección, armonía, determinación y equilibrio. Sobre todo, es un accesorio importante y necesario durante las fumigaciones. De hecho, usar esta vela para encender varitas de incienso, estacas, granos y virutas hace que la ceremonia de fumigación sea completamente natural y aún más espiritual. Ideal también como simple vela para perfumar habitaciones. El jarrón de aluminio se puede reutilizar de forma creativa.