Además de su aspecto decorativo, las bayas rosadas se utilizan para dar una nueva dimensión a una salsa, un carpaccio o un foie gras frito. Acompañan muy bien los pescados y más concretamente el salmón o las vieiras y maridan a la perfección con carnes blancas, como la ternera y dan sabor a todo tipo de rellenos y salsas. Por último, suelen acompañar a las ensaladas de verano ... Son excelentes en requesón, queso de cabra. Se comen enteros o desmenuzados, pero no cocidos, o al final de la cocción.