Friki y místico. Dos universos muy diferentes en apariencia pero que sin embargo tienen un punto común fundamental: lo invisible. La comparación puede sorprenderte, pero solo tienes que indagar un poco para darte cuenta de que las nuevas tecnologías tienen sorprendentes similitudes con la espiritualidad. El asombroso espejo que nos sostienen puede incluso ayudarnos a conocernos mejor a nosotros mismos. Vivir una vida espiritual es “actualizarse” uno mismo. Al cultivar la analogía entre los dispositivos que pueblan nuestra vida cotidiana y nuestra vida interior, Olivier Clerc nos hace descubrir poco a poco un mundo donde todo está conectado. Un mundo de interdependencia, en el que la inteligencia es omnipresente, siempre que abramos los ojos. Apoyándose en tecnologías, nos muestra el valor y significado – en una palabra, el poder mágico – que una práctica espiritual puede tener en nuestras vidas. “Este libro, original y precioso, inscribe lo espiritual en la realidad de nuestro mundo. » STEPHANE ALLIX