A los pies de los Pirineos, en una granja familiar del siglo XVI, Ariège Sève de Bouleau Bio perpetúa una tradición rara y preciosa: la recolección artesanal de savia de abedul. Aquí, tres generaciones de mujeres – Christine, Amandine y la joven Jade – combinan su pasión y su saber hacer para ofrecer una savia pura, fresca y viva, directamente de los bosques preservados de Ariège.
Más que un simple producto, la savia de abedul es un verdadero regalo de la naturaleza. Desintoxicante, revitalizante y lleno de beneficios, acompaña cada cambio de estación y apoya un estilo de vida saludable, cercano a la tierra y a los ciclos naturales. La cosecha se realiza con total respeto por los árboles y el ecosistema, garantizando savia orgánica, certificada HVE (Alto Valor Ambiental), sin ningún tratamiento ni aditivos.
La historia de Ariège Sève de Bouleau es la de una herencia familiar y un profundo amor por la naturaleza. Es también una invitación a redescubrir lo esencial, a recargar pilas, a cuidarse con lo más puro que el bosque tiene para ofrecer.