Omega 3 vegano (120 cápsulas)

La alternativa vegana - omega 3 de microalgas Hasta ahora, ha sido difícil para los veganos y vegetarianos consumir suficientes ácidos grasos omega-3 marinos valiosos, EPA y DHA, que se encuentran principalmente en pescados grasos de agua fría. Ahora existe una alternativa puramente vegetal, las microalgas marinas Schizochytrium sp. (alimento básico de estos peces). Las microalgas como fuente original de ácidos grasos omega-3 forman grandes cantidades de DHA y EPA. El cuerpo necesita DHA para la formación de tejido nervioso, entre otras cosas. Y el DHA también es útil para mantener varias funciones metabólicas. Como componente de ácido graso de los fosfolípidos, el DHA es requerido principalmente por las membranas y las células nerviosas, ya que estas no pueden prescindir de los ácidos grasos. Con un 97 %, el DHA es la grasa más común en el cerebro. Una proporción similarmente alta de DHA, 93%, solo se puede encontrar en los ácidos grasos omega-3 de la retina del ojo humano. Los estudios han demostrado que muchos centroeuropeos ingieren menos de la cantidad recomendada de ácidos grasos omega-3 a través de los alimentos en promedio. Además, se recomienda una mayor ingesta de EPA y DHA para las personas físicamente activas por encima de la media. Según un comunicado de la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria), una dosis diaria de 250 mg de DHA y EPA tiene un efecto positivo sobre la función cardíaca, y de 250 mg de DHA sobre la visión y la función cerebral. Según una comisión de expertos de la UE, las mujeres embarazadas deben asegurarse de que sus cuerpos reciban al menos 200 mg de DHA todos los días. Con tales cantidades, una alternativa vegana protege el medio ambiente y la conciencia. Las microalgas utilizadas para nuestro Omega 3 no se extraen del mar. La cría se lleva a cabo en fermentadores orgánicos especiales y es absolutamente sostenible debido a la protección del medio ambiente y los recursos. El sistema cerrado significa que no hay contacto con la contaminación ambiental. Después de romper las paredes celulares de las algas, se puede acceder al aceite contenido. El aceite de algas se produce en un entorno de procesamiento prácticamente libre de oxígeno, por lo que está óptimamente protegido contra la oxidación. También es interesante que debido al cultivo en sistema cerrado con soluciones nutritivas específicas, las microalgas no acumulan yodo. Si todavía hay pequeñas cantidades de yodo en las microalgas, esto se elimina aún más en el proceso de producción posterior.