Una discusión aparentemente anecdótica entre Swann y Nicolas, amigos desde la infancia.
El tema: cosmética biológica femenina. Unos debates después, varios estudios consultados
o realizado, la observación está ahí: muchas mujeres se sienten atraídas por los cosméticos orgánicos, pero mucho menos por la imagen que transmiten.
Entonces la idea despegó:
para ofrecer una gama de tratamientos que romperían los códigos.
Un guión entre la alta gama y el consumo saludable y responsable.
Jeanne de Flore estaba a punto de nacer.