
Baño de pezón antigrietas. Baño de asiento calmante. Baño muscular relajante. Las sales del mar muerto se han usado desde tiempos ancestrales para el cuidado de la piel. A diferencia de las otras sales, contiene 21 minerales incluyendo magnesio, calcio, sulfuro, bromuro, yodo. Sodio, zinc y potasio que permiten mantener la piel limpia y tienen propiedades antifúngicos y antimicrobianas. ¡Pero hay más! Hemos completado las sales con hojas de manzanilla y salvia por su poder calmante y aceite de romero, por sus propiedades antibacterianas. ¿Para qué podemos usarlas? Para baños de pezón La piel del pezón tiene una gran capacidad de regeneración, y las grietas cicatrizan de forma natural. Así que nuestras sales son una mano amiga para que el proceso sea más rápido. Primero de todo, lávate bien las manos con agua y jabón Disuelve una cucharadita de sales en agua templada. Puedes usar un vaso pequeño para remojar el pezón durante un máximo de 2 minutos. No se recomienda hacer baños más de 2 veces al día. Después del baño deja que el pezón se seque al aire. Superconsejo: aplica un granito de arroz de bálsamo de pezón después del baño de sal para mejorar la regeneración celular. Antes de dar la siguiente toma (y con las manos limpias) riega el pezón con suero fisiológico y sécalo con una gasa estéril con pequeños toques. Sobretodo sin arrastrar. Para baños de asiento La higiene de la zona perineal durante el postparto no es cosa fácil y por desgracia no nos lo cuentan. La zona puede estar inflamada, sensible, pueden aparecer hemorroides o puede haber puntos que provoquen dolor. Igual que antes, primero de todo, lávate bien las manos con agua y jabón. Llena la botella perineal con 400 ml de agua templada y disuelve 3 cucharaditas de sales (el remojo no está indicado en los primeros días del postparto) Riega la zona perineal o anal hasta vaciar la botella. Seca la zona con golpecitos (sin arrastrar) con una toalla limpia y distinta cada vez. Son ideales para una higiene sin dolor cada vez que vas al baño, y os decimos de verdad que se agradece. Para baños relajantes Especialmente durante el embarazo, o en el postparto, cuando todas las zonas estén bien cicatrizadas, un baño con sales del mar muerto puede ayudarnos a aliviar dolores musculares. ¡Y además es la excusa perfecta para relajarte, que tiene un increíble poder curativo 😉! Llena la bañera, agua caliente y 4 cucharadas de sales ¡Y a disfrutar! Por qué nos gusta Es un producto 3 en 1 que puede ayudarnos en muchos momentos Es 100% natural Es derivado de plantas y vegano.