
Estos magníficos colectores de lluvia para jardín están hechos a mano por artesanos de comercio justo a partir de hierro reciclado, y han sido pintados de azul y cepillados con cobre y negro para crear un aspecto desgastado. Su recubrimiento de pintura en polvo mejora su longevidad y capacidad para resistir los elementos, convirtiéndolo en una adición duradera a su jardín durante todo el año. Los cuencos se pueden desenroscar de la estaca para facilitar su limpieza y mantenimiento. Este adorno ecológico está cuidadosamente sostenido por dos estacas en la base, lo que garantiza que se mantenga seguro en su lugar y es fácil de mover debido a su estructura liviana. Esto permite una colocación sin esfuerzo y una integración perfecta en distintos temas y estilos de jardines. Tenga en cuenta que cada producto es único y posee rasgos distintivos como resultado de su naturaleza artesanal.