El tatuaje del pequeño planeta representa un pequeño planeta, enmarcado por dos ramas de laurel, que simboliza la paz, la victoria y la exploración cósmica. Este diseño minimalista pero significativo evoca la armonía universal y el éxito de los viajes, ya sean terrenales o espirituales, invitando a la reflexión sobre los logros personales y la búsqueda del conocimiento.