De producción artesanal, esta sal de cuidado se puede utilizar de diferentes formas, como: pediluvio; baño de manos; baño completo; maleza; en el enjuague después de la ducha; como spray para el rostro y finalmente como ritual de bienestar. Está compuesto por: - Lavanda - Sal del Himalaya - Sal de Epsom - Sal del Mar Muerto. Las creaciones están hechas con altos estándares y todas las plantas provienen de agricultura orgánica. Las botellas están hechas de vidrio grueso, cerradas con un tapón de corcho. Las etiquetas de las botellas están hechas con un 95% de residuos de producción de caña de azúcar no forestal, un 5% de lino y cáñamo. Más allá de la sobriedad de su apariencia, la elección del material es parte de un enfoque de desarrollo sostenible que limita el impacto de la destrucción de los bosques. Fabricado en Italia, el embalaje está hecho de pigmentos negros resistentes a la luz. Está garantizado sin carbono, ácido o metales pesados. Está pegado con almidón natural y tiene certificación FSC.