Conejito, mucha suerte. El simpático conejito sonajero hace felices a los bebés. Las orejas largas, la cara amigable y el divertido patrón de lunares despiertan la curiosidad de los pequeños exploradores. La suave mezcla de materiales crea acentos táctiles para las manos pequeñas. Cuando se mueve la pinza para bebés, se escucha un ruido excitante.