bebé capitán

Por la noche, el Capitán Baby se pone el mono, las botas, el casco - y es hora de sus rondas: ¿Cómo estás, panadero, tu masa no se ha desbordado? ¿No más probóscide que destapar, Sr. Elefante? ¿Sin nudo en la cola, Sr. Serpiente? Oh ! ¡pero hay un incendio en la tienda de dulces de Madame Giraffe! ¡Afortunadamente, el Capitán Baby está aquí! Difícil, al volver al cuartel, justificar la inundación a Mamano que lo recibe a los pies de la cama... ¡Tiene la cabeza de los días en que mojaba la cama! Claro, ella lo regañará... pero no, ¡le está dando un gran pulgar hacia arriba! Y al día siguiente, Papano y Mamano le regalan un pijama de bombero y un bombero: ¡se acabó el riesgo de mojarse salvando la tienda de Madame Jirafa!