Los antiguos finlandeses consideraban que la luna era un ave de la fortuna y un ave del alma. Los pequeños pendientes de madera Kuukkeli son maravillosamente ligeros de llevar. Están hechos de contrachapado de abedul doméstico. En la producción de madera contrachapada sólo se ha utilizado materia prima nacional. Las partes metálicas de la joyería están hechas de acero quirúrgico. El ancho de la joyería es de 30 mm y la altura con ganchos es de 40 mm. La joyería de color abedul está lacada con laca a base de agua. Joyas negras pintadas con pintura al agua clase M1. Las joyas se entregan en un joyero con certificado FSC respetuoso con el medio ambiente. El pegamento, el cartón y el cartón que se utilizan en los joyeros son todos 100% ecológicos. Los antiguos finlandeses consideraban que la luna era un ave de la fortuna y un ave del alma. El joyero viene con un folleto que explica estas creencias.