Declarar estado de emergencia climática

« Nuestra casa está ardiendo y estamos viendo Netflix. » La emergencia climática no es un eslogan activista, es una realidad científica. Para afrontar el mayor peligro en la historia de las civilizaciones, ya no basta con alcanzar la neutralidad de carbono en 2050; Las emisiones globales deben reducirse a la mitad en unos pocos años. ¿Qué pasaría si fuera demasiado tarde para la transición? ¿Y si, lejos de las políticas gradualistas actuales, nuestra única posibilidad fuera declarar un estado de emergencia climática? ¿Y si necesitáramos una movilización general de la sociedad, como sólo las situaciones de guerra han logrado generar en el pasado? El investigador Aurélien Boutaud responde afirmativamente a todas estas preguntas: según él, es necesario ir más allá de la apatía, comprender plenamente la gravedad sin precedentes de la situación y ofrecer las respuestas radicales que exige. Entonces, declaremos el estado de emergencia y salvemos lo que aún se pueda salvar. Y a quienes afirman que esto no sería democrático, el autor nos recuerda lo obvio: no habrá democracia posible en un mundo turbulento.