
Piedra de bolsillo Turmalina negra, de 30 a 40 mm de tamaño. La turmalina es frágil y por lo tanto puede presentar grietas. La turmalina negra ayuda a estar más conectado a tierra y promueve la racionalidad y el pensamiento lógico. Tiene un efecto positivo sobre el sistema inmunológico y fortalece los riñones, el hígado, los intestinos y el estómago. La turmalina negra aporta equilibrio al cuerpo y a la mente, lo que permite la relajación y proporciona comprensión hacia uno mismo y hacia los demás. La turmalina negra ayuda contra el electroestrés, que es causa de apatía, fatiga, dolores de cabeza y/o depresión. La piedra puede reducir el dolor, la dificultad para respirar, el nerviosismo y la tensión y también es adecuada para su uso en casos de miedo al fracaso y mareos. Para obtener más información, consulte nuestra base de datos de minerales en el lado derecho de esta página.