Érase una vez, en algún lugar de Alemania, después de su victoria triunfal sobre el Ejército de Ratones, Clara y su poderoso Príncipe Cascanueces llegaron al Reino de los Dulces, donde fueron recibidos por mágicos copos de nieve danzantes y la legendaria Hada de Azúcar. El hada premió su valentía con una celebración de bailes: la Danza del Chocolate, la Danza del Café y la Danza del Té. Hoy, seamos nosotros quienes develemos los tés mágicos que alguna vez se sirvieron a esos héroes en este país de las maravillas del bosque encantado!