El sueño de un futuro en el que la gente viajaría por el mundo al doble de la velocidad del sonido se hizo realidad cuando el Concorde realizó su primer vuelo de prueba el 2 de marzo de 1969 y se volvió supersónico el 1 de octubre del mismo año. Luego entró en servicio con British Airways y Air France en 1976 y realizó su último vuelo comercial el 24 de octubre de 2003, habiendo completado más de 50.000 vuelos. Como homenaje, nuestra escultura de escritorio Concorde ha sido fundida en aluminio sólido y pulida hasta obtener un brillo intenso, de modo que sus sutiles curvas y ángulos captan la luz.