Sus virtudes son múltiples, todos los autores coinciden en atribuirle una potente acción antineurálgica y antiespasmódica y la recomiendan para migrañas y todo tipo de dolores. Alivia las digestiones difíciles, calma los períodos dolorosos. También es muy conocido por los ojos en baños oftálmicos.Olor a cítrico. Sabor amargo como el de la achicoria que permanece mucho tiempo en la boca como las mil virtudes de esta pequeña flor tan discreta. Infusión: poner 1 sobre o 3 pizcas en 1 litro de agua hirviendo y dejar infundir durante 3 minutos. Decocción: poner 1 sobre o 3 pizcas en 1 litro de agua hirviendo, hervir a fuego lento durante 3 minutos y luego, con el fuego apagado, infundir durante 3 minutos. Las plantas secas se almacenan en un lugar seco, protegido de la luz.