La placa de madera, meticulosamente cortada y grabada, ofrece una fascinante composición artística. Con un tamaño de 6 cm de diámetro, presenta una Flor de la Vida embellecida por la presencia meditativa de un yogui, resaltando sus siete chakras. Esta creación artística fusiona la geometría sagrada con una sutil representación energética. La **Flor de la Vida**, con sus círculos interconectados, simboliza la armonía universal y la interconexión fundamental de todas las cosas. El **yogui meditador** encarna la práctica espiritual, evocando paz interior y equilibrio mental. Los **siete chakras** alineados con el yogui representan los centros de energía del cuerpo, cada uno vinculado a aspectos específicos de la vida y la espiritualidad. 1. **Chakra Raíz (Muladhara):** Estabilidad y seguridad. 2. **Chakra Sacro (Svadhisthana):** Creatividad y sexualidad. 3. **Chakra del Plexo Solar (Manipura):** Voluntad y poder personal. 4. **Chakra del Corazón (Anahata):** Amor, compasión y equilibrio. 5. **Chakra de la Garganta (Vishuddha):** Comunicación y expresión. 6. **Chakra del Tercer Ojo (Ajna):** Intuición y claridad mental. 7. **Chakra Corona (Sahasrara):** Espiritualidad y conexión divina. La combinación de grabado y corte aporta profundidad artística a la placa, creando un objeto único que puede utilizarse tanto como pieza decorativa como soporte energético para favorecer la armonización de los chakras.