El cartel que representa el Languedoc, una colaboración entre Fier du Sud y Lotza, ilustra el alma de esta región vinícola del sur de Francia, donde las montañas se encuentran con el mar. Al fondo se alzan majestuosas montañas mientras el tranquilo y luminoso mar Mediterráneo extiende sus brillantes aguas bajo el cielo azul, dando al conjunto una sensación de tranquilidad y grandeza. Al fondo, exuberantes viñedos se extienden hasta donde alcanza la vista, bordeando las colinas y recordando la importancia de la viticultura en la región. El Languedoc es famoso por sus viñedos, que producen vinos de renombre internacional, enriquecidos por el clima mediterráneo y el suelo único de la región. Entre las viñas se alzan algunas casas tradicionales, testimonio de la autenticidad y el encanto de los pueblos del Languedoc. En primer plano, una botella de vino tinto acompañada de una copa de vino colocada sobre un barril evoca la convivencia y el placer de la degustación, elementos esenciales de la cultura del Languedoc. Esta escena nos sumerge en el mundo de la región, donde el vino es mucho más que una bebida: es un verdadero arte de vivir. El Languedoc es un lugar donde se unen paisajes espectaculares, historia del vino y un estilo de vida apacible, invitando a descubrir este territorio rico y acogedor. Este cartel permite capturar la esencia misma del Languedoc, invitándole a evadirse y contemplar este paisaje típico, símbolo de la identidad de la región.