Derivadas de la desparafinación del aceite base en el proceso de refinería, las ceras microcristalinas están formadas por hidrocarburos saturados que poseen una estructura cristalina de grano fino que las hace mucho más flexibles que las ceras de parafina. Los colores disponibles van del blanco al amarillo y al marrón oscuro. Los usos de la cera microcristalina incluyen la fabricación de velas, cosmética, dental y farmacéutica, alimentos y bebidas, revestimiento de frutas, ceras para joyería, laminado, revestimiento de papel y cartón, pulimentos y despluma de aves, revestimiento de esquí, tablas de snowboard y tablas de surf. Las microceras se combinan bien con solventes para formar una pasta suave, aumentan la resistencia a la tracción y la rigidez, al mismo tiempo que mejoran la estabilidad y la resistencia al desgaste.