El más codicioso. Un equilibrio perfecto entre dulzura, cremosidad y textura crujiente. La mantequilla de maní hecha a mano revela una profundidad salina natural, envuelta en chocolate negro derretido, combinada con un dátil Medjool suave. Un bocado generoso, regresivo, pero sin culpa. Una dulzura familiar, reimaginada con ingredientes nobles.Tubo de 180 g · 10 bocaditos