Complemento alimenticio natural - Vitamina D3

MANTENIMIENTO ÓSEO Y DEFENSAS NATURALES Frasco de 120 cápsulas Vitamina D3 1 - Mantenimiento de las defensas naturales 2 – Formación y mantenimiento óseo 3 – Mantenimiento de la función muscular La principal fuente de vitamina D3 para el organismo proviene de su síntesis, gracias a los rayos UV solares, a partir de un derivado del colesterol. Su concentración varía dependiendo de la luz solar. Es necesario compensar los niveles bajos de vitamina D con una nutrición adecuada durante la estación fría y de forma casi permanente en personas que no exponen su piel al sol. Para quien ? La vitamina D3 está destinada a personas privadas de exposición al sol durante la estación fría (de octubre a finales de abril) o que no tienen suficiente exposición al sol durante la estación cálida (de mayo a finales de septiembre). Comportamiento: 1 - La vitamina D participa en el funcionamiento normal del sistema inmunológico, en adultos y niños. 2 - La vitamina D contribuye a los niveles normales de calcio sérico, a la absorción y utilización normal del calcio y del fósforo. La vitamina D es necesaria para el crecimiento normal y el desarrollo óseo de los niños y ayuda a mantener los dientes normales. 3 - La vitamina D contribuye al mantenimiento de la función muscular normal. En esta nueva fórmula, la vitamina D3 se combina con aceite de girasol. Las sustancias grasas mejoran su asimilación porque es una vitamina liposoluble. Consejos de uso La vitamina D3 se puede consumir en cualquier momento del día. Dosis óptima para adultos: 1 a 2 cápsulas al día, en 1 o 2 tomas. Niño menor de 10 años: 1 cápsula al día. Todos nuestros complementos alimenticios deben almacenarse protegidos de la luz, el calor y la humedad con la tapa bien cerrada. Los complementos alimenticios deben utilizarse como parte de un estilo de vida saludable y no como sustitutos de una dieta variada y equilibrada. Mantener fuera del alcance de los niños. No exceda la dosis diaria recomendada. La suplementación vitamínica de lactantes y niños debe estar sujeta a supervisión médica. Cualquier ingesta adicional, sin supervisión de un profesional de la salud, puede presentar riesgos para esta población.