Jabón sólido, certificado orgánico, saponificado en frío, 5% sobregrasa, sin aceites esenciales, vegano. Hecho a mano en nuestros talleres en el corazón de los Alpes. Inspirándose en el famoso jabón, nuestro Alepo está diseñado con toda sencillez: aceite de bayas de laurel, conocido por su acción purificante, astringente y calmante, así como aceite de oliva rico en ácidos grasos y conocido por sus cualidades nutritivas y suavizantes para la piel. Por último, agua y glicerina, imprescindibles para la saponificación en frío. La sinergia de sus aceites permite una limpieza profunda, aportando al mismo tiempo un toque de suavidad a la limpieza diaria. Sin aceites esenciales, puede ser apto para todo tipo de pieles. Al ser cada producción única y artesanal, el color de los jabones puede variar, sin alterar la calidad del producto.