Este pequeño pero bonito juego de cubos es imprescindible para jugar en el arenero o en la playa, solo o con otros niños. Jugar al aire libre con arena y agua fomenta las habilidades motoras y los sentidos de su hijo. El pequeño juego de cubos BIO está fabricado en Dinamarca a partir de bioplástico, una materia prima sostenible que consiste en un 90 % de caña de azúcar, y ha sido galardonado con el Cisne Nórdico por ello. El juego de cubos consta de un cubo, un colador, que también se puede utilizar como tapa para el cubo, una pala, un rastrillo y un molde de arena con un simpático motivo de animal. Todas las partes se mantienen en tonos apagados y naturales. El juego de cubos BIO se puede usar a partir de 10 meses y es apto para lavavajillas.