Estas sillas de comedor exudan un encanto atractivo. Son un complemento práctico y llamativo para su interior. Estas sillas de cocina están hechas de roble macizo, una madera dura con vetas densas. A cada silla se le ha dado un acabado blanco para darle a cada pieza una hermosa apariencia. Estas sillas son excepcionalmente estables, duraderas y llamativas. Además, estas sillas de comedor están completamente hechas a mano, y la exquisita artesanía y las vetas refinadas de la madera hacen que cada pieza sea distintiva y ligeramente diferente de la siguiente. Cada paso del proceso, ya sea pulido, pintado o lacado, se lleva a cabo con el máximo cuidado. La entrega incluye 4 sillas. Nota importante: La veta de la madera varía de una pieza a otra, lo que hace que cada pieza sea única. La entrega es aleatoria.