El aceite de macadamia pertenece al grupo de aceites cuya composición es muy similar a la de la piel humana: se compone de triglicéridos monoinsaturados, hasta un 85%, lo que lo convierte en el poseedor del récord entre los aceites naturales. Los triglicéridos Palmitoleicos Omega-7, conocidos por su efecto antioxidante, forman alrededor del 20% de su composición. El ácido palmitoleico está contenido en la piel pero con la edad su nivel disminuye. El aceite de macadamia es una alternativa potencial para reducir las consecuencias del envejecimiento. Debido a sus propiedades suavizantes y su efecto hidratante, es ideal para pieles secas y envejecidas: ayuda a que la piel mantenga su suavidad, elasticidad y apariencia fresca. Nombre botánico: Aceite de semilla de Macadamia Ternifolia Origen: Kenia Extracción: Prensado en frío