Hecho a mano, justo y ecológico.
Mi nombre es Elma Hogeboom, artista sostenible, jardinera apasionada y amante del té.
En 2017 comencé mi misión hacia el verdadero arte sostenible cuando descubrí que la mayoría de las pinturas en las tiendas de arte contienen materiales venenosos y metales pesados, como cadmio, cobalto y plomo.