Un paquete promocional para proponer una nueva forma de utilizar la estaca de Palo Santo: la sublimación. Palo Santo es un incienso natural de tradición milenaria, obtenido de la madera de Bursera graveolens. Los beneficios que desprende su aroma son muchos: purifica las energías de los ambientes, promueve la armonía interior y el reequilibrio mental y físico, estimula la concentración y la introspección. Gracias al innovador difusor de cobre, es posible obtener la sublimación de la resina contenida naturalmente en la madera de Palo Santo, disfrutando así de un aroma puro. Las múltiples formas en espiral que se encuentran en este accesorio permiten amplificar el efecto purificador y benéfico del incienso de Palo Santo, creando un flujo armonioso de energía en el ambiente en el que se utiliza. ¿Por qué elegir el formato Pequeño? La variedad 'Pequeño' representa la innovación de la fumigación a base de Palo Santo. Las estacas pequeñas se producen a partir de madera de Bursera graveolens recolectada entre Ecuador y Perú y se caracterizan por un aroma intenso, dulce y envolvente. Es la selección especialmente estudiada por Herborea para usar con el sublimador, ideal para quienes quieren disfrutar de la pura esencia de la estaca de Palo Santo, sin humo y sin necesidad de volver a encender. ¿Por qué elegir la sublimación de Palo Santo? Este nuevo difusor de cobre sostiene el palo de Palo Santo a unos centímetros de la llama de una vela. Tan pronto como comienza a calentarse, la barra libera el aroma de la resina que contiene en el aire sin producir olores relacionados con la combustión. El difusor es fácil y cómodo de usar. La fumigación, de hecho, puede continuar de forma autónoma durante más de una hora. Cuando el aroma en el aire comience a disminuir, simplemente voltee el palo de Palo Santo y continúe la sublimación hasta que se acabe el aroma. La difusión de la esencia de Palo Santo debe ser lenta y de mantenimiento para el medio ambiente. Sugerimos mantener la llama a unos 3-6 cm de la estaca. El difusor debe ser asistido y no debe ser abandonado antes de haber encontrado la distancia adecuada entre la llama y la estaca. Esta distancia puede variar en función de varios factores. La estaca debe recibir suficiente calor para permitir que la resina se sublime, pero no debe ennegrecerse ni quemarse.