Un aceite de color verde intenso y sabor característico. En la medicina popular, la semilla de cáñamo tiene un papel crucial. Hoy en día, los tipos con efectos narcóticos son ampliamente conocidos. Sin embargo, las semillas de cáñamo utilizadas para la siembra no contienen ninguno de estos componentes (como el THC). Está formado por elementos fisiológicamente mucho más importantes, lo que lo convierte en un aceite realmente preciado. Uno de los aceites más característicos y deliciosos, que también puedes utilizar después para dar sabor a tus comidas. Ideal para ensaladas y sopas cremosas, pero también va bien con verduras crudas o fritas, tomates, comidas con albahaca y quesos salados (por ejemplo, queso feta). También se puede combinar bien con aceite de maíz.