Drosselmeyer es una empresa sueca de diseño e innovación. El primer producto fue un cascanueces. El diseñador e inventor jefe Erik von Schoultz pensó que debía haber una manera fácil de romper una nuez, la solución era una galleta en forma de cono con palanca.
El producto ahora se vende en todo el mundo y ha recibido numerosos premios. Está representado en la exposición permanente de diseño sueco del Museo Nacional. El producto lanzado más recientemente es un colador de té que es fácil de llenar, no gotea las hojas de té y es fácil de limpiar. El objetivo de la empresa es fabricar productos que tengan un propósito real con altas exigencias de diseño y funcionalidad. Productos que perduran por generaciones.
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