Las patas de pollo son una opción popular para la masticación canina porque brindan una experiencia de masticación agradable y pueden beneficiar la salud dental de los perros. Masticar patas de pollo puede ayudar a eliminar la placa y el sarro de los dientes de los perros. La textura rugosa de las patas de pollo actúa como un cepillo de dientes natural, frotando suavemente los dientes mientras se mastica. Esto puede contribuir a una mejor higiene dental y a un menor riesgo de problemas dentales. Proporcionan así una buena salud bucal. Es fundamental elegir las patas de pollo según el tamaño de tu perro. Para perros pequeños, una pierna de pollo entera es adecuada, mientras que para perros medianos y grandes (perros de más de 15 kg) las patas de pollo pueden ser demasiado pequeñas y presentar un riesgo de ingestión demasiado rápida. En este caso es preferible elegir alternativas más adecuadas a su tamaño como piel de vacuno, etc. Al ser un producto 100% natural, su forma puede variar según el animal. Los productos no pueden ser idénticos en tamaño y peso. Foto no contractual