Quiastolita, una piedra fascinante que evoca protección, transformación y equilibrio espiritual. Conocida como la "piedra de la cruz", la chiastolita es famosa por su patrón natural en forma de cruz. Ofrece una conexión profunda con la tierra y facilita el viaje espiritual. Para conservar su fuerza, dale un baño suave y déjalo recargar en contacto con la tierra o en compañía de otros cristales compatibles. Deja que la chiastolita sea tu guía, ayudándote a encontrar el equilibrio entre lo espiritual y lo terrenal. Propiedades energéticas de la chiastolita: Protección espiritual: La quiastolita actúa como un escudo espiritual, brindando protección durante los viajes interiores y las meditaciones profundas. Transformación: Esta piedra facilita la transformación espiritual, ayudando a trascender obstáculos y evolucionar hacia un estado superior de conciencia. miEquilibrio espiritual: La quiastolita promueve el equilibrio entre el mundo espiritual y el mundo material, ayudando a integrar las enseñanzas espirituales en la vida diaria. Modo de purificación: Para conservarlo en todo su poder energético merece un ritual de purificación. Agua Dulce: Un suave baño en agua pura ayuda a regenerarla. No hace falta una cascada, basta con una inmersión tranquila. Luz suave: La chiastolita también aprecia la luz suave. Colóquelo cerca de una ventana para una sesión de recarga bajo los relajantes rayos del sol. Recarga: Una vez purificado, ¿cómo puedes darle un impulso? Cristales complementarios: se lleva bien con otros cristales. Colóquelo junto a cristales compatibles como labradorita o turmalina negra para lograr una sinergia energética. Contacto con la Tierra: Plántalo en una maceta o en el suelo para que encuentre sus raíces y se reconecte con la energía de la tierra.