Esta pulsera atrevida pero elegante presenta un diseño clásico de cadena de eslabones cubanos, realzado con vibrantes circonitas rectangulares de colores del arco iris para un toque moderno. Cada piedra está cuidadosamente incrustada, creando un sorprendente juego de colores que añade personalidad y encanto. El acabado vermeil dorado realza su atractivo lujoso, convirtiéndolo en una pieza versátil que puede usarse de manera informal o para ocasiones especiales. Con una longitud ajustable de 16 a 18 cm, garantiza un ajuste cómodo. Su aspecto grueso pero refinado lo convierte en un accesorio llamativo por sí solo o combinado con otras pulseras. Un regalo significativo y único para ella, perfecto para quienes aman la elegancia colorida con un toque de audacia.