El cuadro “Ángel de la Guarda” está realizado en plata y tiene un acabado satinado y brillante. La parte trasera es de madera marrón, provista de un agujero y una ranura, para poder colgar el objeto en la pared y, al mismo tiempo, colocarlo sobre ella mediante un pie que se introduce en la ranura correspondiente. Este producto, como todos los demás del surtido, ha sido sometido a un tratamiento antioxidante para que no pierda su brillo y se mantenga inalterable con el tiempo.