Suavidad, finura y espíritu marinero... Esta tobillera de acero inoxidable bañada en oro encanta por su delicadeza: una pequeña concha de oro en el centro, enmarcada por dos perlas blancas naturales. Refinado, ligero y resistente al agua, adorna el tobillo con elegancia y discreción. Una pieza de joyería atemporal, perfecta para clientes que buscan poesía veraniega y elegancia natural.