El gato Rabia es tímido. Muy tímido incluso, y confunde sus palabras tan pronto como comienza a hablar. Pero por amor se esforzará, trabajará y repetirá. Tomará lecciones y comenzará a repetir oraciones muy complicadas con palabras muy extrañas: "Australo-sandías" o "Ouada-Gadoue". Después de terribles esfuerzos, estas palabras se convertirán en "australopitecinos" y "Ouagadougou". ¡Él se convertirá así en un verdadero príncipe de Chat-romant, y la hermosa señorita Tinguette solo puede ser seducida por quien ha sido capaz de encontrar las palabras más simples y sinceras! Un pequeño álbum lleno de humor y ternura para descubrir que ningún complejo es insuperable cuando hay voluntad. Nunca debes desanimarte. Texto: Stéphanie Dunand-Pallaz, Ilustraciones: Sophie Turrel, 40 páginas.