Las pegatinas transforman los envases en fantásticos juguetes. Solo en Viena, se producen alrededor de 120.000 toneladas de papel de desecho cada año. Gran parte de este se compone de embalajes como cajas de cartón. Las pegatinas de BADALA (derivadas de la palabra punjabi que significa "transformar") las convierten en juguetes económicos y ecológicos. La idea es tan simple como inteligente, y única en el mundo: las hojas de pegatinas autoadhesivas y autoexplicativas permiten transformar una caja en un coche de carreras, un barco, una lavadora o una estufa. El resultado son juguetes valiosos desde el punto de vista educativo que estimulan la imaginación, la creatividad y la inteligencia de los niños y, al mismo tiempo, les enseñan a utilizar los recursos de forma responsable y lúdica.
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